Gabriel Ventura Gulí: “La música es mi escape, mi salvación”

En Agosto de 2022, el cantautor argentino Gabriel Ventura Gulí se instaló en España y desde su llegada realizó incontables presentaciones tanto en pubs y bares como en las calles de Madrid. A fin de año ganó la 1º Edición del Concurso de Cantautores organizado por "La Canalla Live", donde participaron más de 30 artistas. Gracias al incentivo económico que le dio este premio pudo grabar sus nuevas canciones, las que dan forma al EP "Quizás estoy cambiando", que ya se puede escuchar en las plataformas. Vivir lejos de casa me hizo reconectar con la canción argentina, volví a escuchar la música con la que crecí y me identificó toda la vida. Charly, Fito, Spinetta, Cerati, Andrés Calamaro...pilares de la canción argentina y latinoamericana”....

-Elegiste vivir en España desde hace algún tiempo ¿a qué cosas te acercó la distancia?

-Estar viviendo en Madrid ahora y cuando viví en Aarhus, Dinamarca, allá por 2021, me hizo reforzar mucho nuestra cultura. Me llevó a entender un poco más cómo somos, nuestra idiosincrasia como argentinxs, y realmente me parece muy fuerte. Lo relaciono con el choque de culturas, por ejemplo: en Madrid o en Aarhus es raro ir a la casa de un amigo de manera improvisada, o cambiar el horario de una juntada: se pueden llegar a enojar y mucho. En cuanto a lo musical, me llevó a revisar nuestra música y todo lo que escuchaba de chico. Mucho rock nacional clásico que ahora, estando acá, me atraviesa de una manera muy especial. Esto me impulsó e inspiró para componer estas nuevas canciones y para buscar este sonido en la producción, bien de canción argentina. Creo que tendría que ser un género musical en sí mismo. Así que estando lejos me acerqué en este sentido.

-"Quizás estoy cambiando" es el título de su flamante trabajo discográfico. ¿Qué te hizo cambiar la música? ¿Por qué elegiste la música como tu forma de vida?

-La música es mi escape, mi salvación. Muchas veces me entiendo a partir de lo que escribo, me doy cuenta de procesos que estoy viviendo, canalizo experiencias... Es una de las formas que encontré para estar en diálogo conmigo mismo. Soy una persona muy introspectiva y a la vez muy social porque trabajo con la exposición, pero siempre necesito volver a la cueva para recargarse después de estar muy para afuera. En este proceso de mi vida la música y estas canciones acompañaron mi cambio como persona. Volví a estar entusiasmado como cuando era adolescente tocando y haciendo canciones y eso hacía años que no me pasaba. Me devolvió una vitalidad que tenía guardada en alguna profundidad. Me hizo enamorarme de la vida nuevamente.

-¿Por qué la tapa de tu disco tiene una versión de la carta de la muerte en el Tarot?

-La carta del Tarot de la muerte representa la transformación y el renacer, que es justamente la etapa que estoy viviendo. Algo de lo que contaba anteriormente. Tuve muchos años de introspección, estudio y me estaba faltando motivación para llevar adelante mi proyecto. A veces se vuelve bastante pesado producir recitales, pensar videos, contenidos, canciones. Son muchos los roles en los que hay que desempeñarse para que la carrera crezca y hay que dedicarle mucha energía. Y sobre todo roles que no son musicales pero son igual de importantes. Si no estás bien enfocado puede ser muy frustrante. Ahora apunto a crecer y de a poco ir delegando. En este renacer, la motivación es alta y todo se vuelve más fácil. Estoy entendiendo más el circuito y encontré otra perspectiva que antes no veía. Me siento pleno en mi vida y musicalmente y por eso el significado y el mensaje del EP. Creo que mucha gente se puede sentir identificada con esto.

-¿Miraste la serie sobre la vida de Fito Páez? ¿A qué lugares te llevó?

-Estoy en ello, me queda el último capítulo. Me encantan los biopics de música en general. A la vez soy muy fan de ver entrevistas, de conocer los procesos artísticos de las personas que admiro y Fito sin duda para mí siempre fue un faro. Es una de las personas por las cuales hago lo que hago. Me gusta desde que nací, con el Amor después del amor, en el 92. Y recuerdo verlo cantar con tanta libertad y con tanta expresividad que me llegaba y me emocionaba mucho. Hoy en día sigo admirando justamente sus ganas de seguir haciendo, grabando, tocando. Es una persona que no frena y que ama lo que hace. Fue muy fuerte ver dramatizada su vida; anque ya conocía los detalles, me sorprende ver por todo lo que pasó y cómo transformó tanto dolor en canciones hermosas, en regalos para todxs. Es lo mágico que tiene la música, creo que a él particularmente más que a nadie lo salvó y a la vez nos salvó a muchxs.

-La Argentina está atravesada por una compleja crisis económica y política ¿Cómo observas a la distancia la realidad del país?

-Tuve la posibilidad de estar 10 días en Abril tocando en Buenos Aires, hacía 8 meses que no iba y me pareció impactante la situación. Nunca había vivido algo así, me imagino que la hiperinflación a fines de los 80 debe haber sido algo parecido. No entendía los precios y veía mucho descontrol con eso. Y desde acá lo escucho por lo que me cuenta mi familia y amigxs sobre todo. "No es como en los diarios desde allá", ya lo decía Charly en el 83 con "No soy un extraño". Ojalá que todo se equilibre y podamos estar mejor, sobre todo que la gente pueda comer. Algo que nunca entendí es cómo en un planeta que se tiran toneladas de comida por día haya gente con hambre. Eso no le puede convenir a nadie, no tiene sentido. Ojalá algún día entendamos que somos una red y que estamos todxs conectadxs. Que si le hacemos mal al planeta, a la sociedad, nos hacemos mal a nosotrxs y que si algunxs están bien a costa de otrxs es un desequilibrio, y que ese desequilibrio nos va a enviar una factura en algún momento...

-¿Qué quedó de tu proyecto Ey Rocker? ¿Que aprendiste musicalmente durante esos años?

-Tanto Ey Rocker como Catalina (mi primera banda de canciones propias) fueron mi escuela, lo que me permitió desarrollar el sonido que tengo hoy en día. Que creo es la síntesis de tantos años de hacer canciones. Hice todo el recorrido para llegar al momento en que estoy ahora. Encontré y pude lograr el sonido que buscaba en ese momento, solo tenía que esperar, crecer y dedicarle años para lograrlo. Ese momento llegó y es de plenitud, siempre con la inquietud de seguir aprendiendo, tomando clases y desarrollándome como músico. Creo que cuanto más entrenamos, más sensible se vuelve la capacidad que tenemos como compositores de poder decodificar nuestras emociones, nuestro lenguaje. Y el mensaje se hace más claro. Las letras son más simples, los acordes son menos. La verdad que cuando me comparten canciones de esas épocas me pone feliz y me gustan mucho.

-Dicen por ahí que existe otro mundo, pero habita en este mundo. ¿Cómo es el mundo de Gabriel Ventura Gulí?

-Mi mundo hoy está enfocado en la música y el amor. Hoy estoy enfocado básicamente en eso y en terminar de instalarme en Madrid. En poder generar un ida y vuelta con Argentina para poder ir y venir seguido. Por suerte con mi pareja estamos enamorados de la música y todo se hace más fácil de esa manera. La casa está llena de melodías y canciones todo el día, de alumnxs que entran y salen, de amigxs, de instrumentos. Por suerte, como pasa en el universo que está en constante expansión, mi mundo no es la excepción. Además el final de la historia ya lo sabemos y es la única certeza que tenemos, así que disfrutemos este rato que nos toca por este lado y a vivir con toda, que es más divertido.

GABRIEL VENTURA GULÍ (5 de Marzo de 1992, Buenos Aires, Argentina) es músico, compositor, actor y multi instrumentista argentino. Nació en Buenos Aires y creció en López Camelo, un pequeño barrio de Tigre, donde a los 11 años comenzó a tocar la guitarra y luego el piano. Desde temprana edad integró diversas bandas y formaciones locales hasta que, años más tarde, plasmó sus canciones de adolescencia en el álbum "El comienzo del fin" (2009) junto a Catalina, su banda de ese momento. Luego de esta grabación, Gabriel decidió formar el proyecto solista Ey Rocker, fundado en 2011. Con este seudónimo editaría dos discos de estudio -"Cuantos por despertar"(2013) y "¿A quién podré cantarle hoy?" (2017) -, un álbum en vivo - "Cambio de rumbo y despertar" (2015) - y el single "Hoy en una canción"(2018). Simultáneamente a estas experiencias, el músico comenzó a integrarse al ámbito teatral, donde actuaría y compondría música original para obras de teatro. Se destaca, por ejemplo, la obra teatral "La Elegida", de Paula Fanelli y Laura Névole, donde compuso, ejecutó y adaptó piezas para tocarlas en vivo. También escribió música para varios cortometrajes. Durante la cuarentena de 2020, Gabriel creó y estrenó "CONOCIENDO MÚSICA", un podcast donde entrevista a músicas y músicos que le gustan:

https://open.spotify.com/show/6WdJbnTz0Xz9ujQXMihyp4?si=dImuasX9TkeYn6w9W8gw6A&utm_source=whatsapp&dl_branch=1

Desde septiembre de ese año hasta septiembre 2021 se mudó a Aarhus, Dinamarca, desde donde pudo concluir a distancia el proceso de mezcla y post producción de "El Puente Infinito", primer disco editado bajo su nombre. A lo largo de 2021 publicó tres singles: "Enero", "Respiro" y "Luz y Movimiento", como adelantos del álbum mencionado, disponible en las plataformas digitales desde Noviembre del mismo año. A finales de 2022 publicó "Buenos Aires Infinito", un repaso de 10 canciones del último show del músico antes de ir a vivir a Madrid, donde presentó oficialmente "El Puente Infinito" junto a un quinteto de cuerdas e hizo un repaso por algunas canciones de su proyecto Ey Rocker. Actualmente está difundiendo su nuevo Ep "Quizás estoy cambiando", donde regresa al formato canción.